viernes, 6 de marzo de 2015

Los expertos en voces nos enseñan a tratarlas bien

Las voces son un síntoma típico en Psiquiatría. Como explico en esta otra entrada, pueden tener diversas causas, pero en un acercamiento médico simplón, se convierten a veces en el motivo principal y sin matices para indicar dosis altas de fármacos incómodos, como en el juego ese en el que un topillo asoma la cabeza de vez en cuando, y se le da con un mazo.



Ya explico en otra entrada que a mí, más que la teoría (que algo hay que tener) me sirve la experiencia.

Vamos a ver lo que explican expertos en voces (porque las tienen)

http://vocesenlacabeza.com/


Conforme se van abandonando las conductas de seguridad se van necesitando estrategias de afrontamiento incluso más fuertes para ayudarnos a afrontar las voces. Obviamente, la medicación habitualmente ayuda al menos un poco en esta área. Cada persona necesita encontrar la estrategia que le funciona a ella en concreto, porque cada uno es diferente. Tenemos que probar cosas hasta que encontremos que funciona para nosotros. ¿Por qué no probar con la lista siguiente, cada prueba durante un día, para ver si nos funciona?
1. Tararear una melodía o silbarla… busca una melodía que demuestre tu determinación. Si parece que esta ayudando un poco entonces extiende el periodo de prueba a toda una semana.
2. Escuchar música. Cuanto más interesante y relevante sea más te podrá ayudar. Como antes, si parece que esta siendo un poco de ayuda, prueba durante una semana antes de dejarlo.
3. Copiar este texto y leerlo cuando las voces aparezcan.
4. Pensar en la experiencia más positiva que hayas tenido, por ejemplo, cuando ganaste un premio en una competición deportiva escolar o fuiste elogiado. Mantén la imagen en tu mente un momento, y permite que tu mente se recree en ello. ¿Cómo reaccionan las voces?
5. Decirse a uno mismo que la voz tiene un significado personal para uno y que esto es una fuerza positiva en tu vida incluso si parece negativa.
6. Utilizar una estrategia espiritual positiva como un mantra o rezo.
7. Contestar a las voces si el contenido de las voces no es verdadero. Si la voz está diciendo algo que tu sabes que no es verdad, es importante que lo trates como si fuera un error puntual, como si tu nombre estuviera mal escrito en una carta. Solo porque una voz diga algo no significa que sea cierto.
8. Utiliza el teléfono móvil sin encenderlo. Dile por teléfono a la voz que hablarás con ella más tarde y que estás ocupado. Si la voz dice algo negativo corrígela reprendiéndola en el momento que lo haga.


http://postpsiquiatria.blogspot.com.es/2014/06/escuchando-voces-via-primera-vocal.html


Mis voces son una parte importante de mi identidad —literalmente, son parte de mí— así que sí, las echaría de menos si se fueran. 


http://entrevoces.org/?lang=es_ES&page_id=4


el movimiento internacional de escuchadores de voces plantea que estas son una experiencia humana normal y no el mero síntoma de una enfermedad. Por tanto, el contenido de estas experiencias es esencial para establecer un camino real de recuperación, ya que las alucinaciones auditivas están insertas en la vida de las personas que las experimentan, y con frecuencia, cuando tienen una carga negativa, no son sino la reacción a un acontecimiento traumático que no se ha resuelto de manera adecuada.



¿Y qué implicaciones puede tener esto en el tratamiento farmacológico?


Se me ocurren algunas:


En cualquier caso, merece la pena evitar el estrés: propiciar un entorno tranquilo, predecible, con pocos estímulos, enseñar alguna técnica de respiración para relajarse, ocupar la atención con música, uso de ansiolíticos a dosis bajas... Y supervisión directa mientras las voces sean angustiosas, imperativas o con repercusión en conductas de riesgo.


En las voces secundarias a estados de ánimo eufóricos o depresivos, lo primordial es tratar la depresión si la hay, y usar eutimizantes eficaces (litio), con la mínima, o a veces ninguna, asociación con neurolépticos.


En las alucinaciones visuales: control de riesgos, y tratamiento de la causa de la "inflamación neuroquímica".


Y en las voces de esquizofrenia... Propiciar contenidos de pensamiento serenos y positivos. Y en lo farmacológico, enlentecer un poco el flujo de pensamientos, y bajar el nivel de alerta hasta lo razonable (eliminando esa molesta autorreferencialidad), pero sin "escayolar" la mente. Los estudios (hay pocos serios, pero alguno hay, hasta a siete años) dicen que sí, que algo de neuroléptico hay que mantener. Pero que dosis altas, aparte de un abotargamiento inaceptable, peor rendimiento funcional, y bastante riesgo somático, producen neuroadaptaciones (ejemplo, mayor producción de dopamina, al notar el cerebro que "no llega a su destino" por bloqueo excesivo de sus receptores) que pueden dar fenómenos de rebote artificialmente intensos al dejar de golpe el tratamiento (con el perverso efecto de hacernos creer que la persona necesita esas megadosis).



Abundo en el tema en esta otra entrada sobre los neurolépticos.

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